TESTIMONIO I - MILAGRO I -
El día sábado 18 de Octubre de 2014, día de la Misa de Nuestra Amada Madre; a la 1 de la madrugada , noche del viernes, antes de acostarme, dejamos a MAIA en la cocina ,rece un Madre Nuestra pidiendo que si no iba a mejorar, se la llevara con Ella y sin ningún sufrimiento.
Alrededor de las 7.00 hs., se levanta Liliana y me dice que MAIA nació al Cielo. Estaba como la había dejado antes de acostarme, se quedó dormida con una carita de paz increíble.
TESTIMONIO II - MILAGRO II-
Por qué el testimonio ahora y no antes no sé, quizás porque es la Fiesta de Nuestra Madre; siempre pensé hacerlo y nunca lo hice.
Claro la pregunta es quién es MAIA?
MAIA es una perrita mestiza pequeña, marca perro , que apareció en nuestras vidas durante Enero de 2002. Todos los días cuando esperaba el colectivo para ir al local a 2 cuadras de casa , veía a MAIA, cruzar de una vereda a otra con cierta dificultad, como cuando uno camina en la arena hirviendo en la playa y va a los saltos. Le comento a Liliana de llevarla a casa , pero a la noche nunca estaba, al 3er. o 4to. día, llegamos a casa dejé todo, tomé una linterna y me fuí a la esquina, empecé a abrir los pastizales que tenían como un metro de alto, y allí estaba.
La primer noche bien: aseo, comida, trapitos para dormir, todo bárbaro; a la 2da. noche comenzó a quejarse, no caminaba, no durmió ni nos dejó dormir. Decidimos llevarla al veterinario.
Al hacerle una placa y un análisis de sangre surgen una descalcificación total, tenía sus huesitos transparentes, de ahí sus quejidos y su forma de caminar (que ya no lo hacía). Además se había comido una garrapata que interiormente y al estar baja de defensas, le estaba causando una gran infección.
El veterinario dice de darle una droga que se estaba probando, un perro había muerto, otro estaba peor, y otro después de estar peor mejoró. A MAIA, le tocó ésta última posibilidad.
Recuerdo que realizamos pedidos a la Virgen, al Arcángel San Uriel, a los Angeles Principados, a los Coros Angélicos, a San Cristóbal...
En la dieta había que darle calcio, y le colocábamos una cucharada sopera en la comida.
A MAIA el Jueves Santo de ese año logré pararla aunque se cayó, y sí el Domingo de Pascuas viendo al Amado San Uriel que asomaba entre los árboles, MAIA comenzó a dar sus primeros pasos. Su nombre en alusión a la famosa bailarina, ya que ella no podía caminar.
MAIA nos regaló todos estos años; eramos felices viendo cómo saltaba arriba del sillón desde el piso, simplemente cuando caminaba.
Nos enseñó a luchar, a perseverar, a luchar, y a creer que siempre se puede... que NUESTRA AMADA MADRE siempre y todo lo puede.
Nos regaló 12 años de amor y felicidad. GRACIAS MAIA.
GRACIAS MADRE NUESTRA!
Hno. Jorge Torres y Hna. Liliana Antonov
